Kiev ha amenazado con cortar la electricidad en las repúblicas populares de Donetsk y Lugansk, dominadas por las milicias antifascistas que luchan contra el Gobierno del multimillonario Petro Poroshenko.
El Gobierno ucraniano justifica esta nueva medida de presión y aislamiento argumentando que desde hace meses los combates entre el Ejército fascista y las milicias populares han interrumpido la distribución de carbón y paralizado el funcionamiento de las plantas geotérmicas que concedían la autosuficiencia energética a Ucrania.
Kiev se está desvinculando de sus compromisos adquiridos con las provincias en guerra. Desde hace unos meses no les paga ni las pensiones ni beneficios adicionales de seguridad social y ahora amenaza con cortar el suministro eléctrico y de gas.
“Para salvar el sistema energético hay que imponer límites a todos. No puede haber región de Ucrania que no quede sujeta a los cortes eléctricos”, ha declarado el viceministro de Energía ucraniano Oleksander Svetelyk en referencia a las zonas en conflicto de Donetsk y Lugansk.
Ambas provincias, proclamadas repúblicas populares antifascistas, “han quedado advertidas este lunes de que si no apagan ellos mismos las luces, se las apagaremos nosotros” para afrontar el déficit diario de 3,500 megavatios que afronta el país.
LibreRed/EP
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