Gavin Long, el exmarine afroamericano de Kansas City que mató a tres policías en Baton Rouge (Louisiana), vivía preocupado por las injusticias cometidas contra los negros en Estados Unidos y decidió hacer justicia.
Al día siguiente de la masacre de cinco policías en Dallas, había publicado en YouTube un video revelador: “Esto es justicia”.
Su ataque en Baton Rouge fue una auténtica emboscada, según confirmaron los investigadores. Una trampa “meticulosamente planificada”.
“Quería atacar a los policías, su objetivo era precisamente la policía, como revelan sus movimientos y sus acciones”, explicaron las autoridades.
Long publicó más de un video en Internet en las últimas semanas, y en algunos incitaba claramente a reaccionar frente a la prepotencia y el uso de la violencia de parte de los agentes.
En Facebook se había registrado con un pseudónimo, Cosmo Setepenra. “Justicia para todos los afroamericanos”, “no basta conocer los propios derechos, hay que hacerlos valer”, había escrito en uno de sus últimos mensajes, junto a una foto de dos niños negros.
Long, que en los últimos días había estado en Dallas, tenía en el bolsillo una ficha de la Washitaw Nation, un movimiento nacionalista afroamericano que estuvo alguna vez en la mira del FBI.
Entretanto, la situación amenaza con volverse explosiva también en Baltimore, donde los jueces absolvieron a otro de los agentes involucrados en la muerte del joven negro Freddie Gray, en abril de 2015.
Ansa
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