Macri es un afortunado heredero, de su padre y de Cristina. Pero se “queja de lleno” como dicen las viejas. Cristina le dejo todo servido, para que lleve adelante, su único plan de Gobierno. El robo Pirata de la Caja del Estado, a favor de la oligarquía, multinacionales y Bancos Privados.
Los Ceos del gobierno depredador de derecha, que gestiona a la economía Argentina actualmente, se quejan publicitariamente de la “herencia recibida “
Cuando Macri asumió el Gobierno, y se puso a bailar en el Balcón de la Rosada, le dejo claro al pueblo argentino, la alegría que sentía de haber llegado a ese Balcón, el mismo desde donde Perón con sus discursos demagógicos, engaño tantos años a los trabajadores, y ayudo a los oligarcas del campo y a los capitalistas , a mantener sus propiedades y el Poder.
Hay que tener en cuenta, que es desde la Casa Rosada, cuando se ingresa, luego de bailar en el Balcón, donde se maneja la Caja del Estado, venerada como el Santo Grial de Jesús, como el sueño de enriquecimiento personal, de todos los burócratas que llegan al Gobierno.
Es importante observar, que haciendo juego con la política económica, de las naciones más importantes de la burguesía mundial, el Macrismo no tiene planes de desarrollo capitalista al estilo de antes, el de la explotación del trabajador produciendo, sino solo la transferencia a mansalva de inmediato, de los dineros que puede proporcionar el Estado, a la clase de los más ricos.
Esto es, favorecer la liberación de cargas impositivas a la clase más pudiente, especialmente a la oligarquía agropecuaria, e incorporar deuda externa, cuyas divisas son sacadas de inmediato del país, por los especuladores de todo tipo, como la Bolsa, la Banca Privada y los monopolios enquistados en el poder. Deuda que como siempre, será responsabilidad del pueblo trabajador, saldar a los buitres de la Usura.
Para la oligarquía Argentina, y el gobierno recién instalado que la representa, alcanzarían con la economía primerizada de la producción agropecuaria, minera, y la importación resolviendo las necesidades de producción industrial.
Es que en el Imperio capitalista, todo su desarrollo desde la caída de la URSS, marcha en esa dirección. No se dedica a impulsar en sus propios países, nuevos planes de desarrollo, ni tiene soluciones a largo plazo, para el aspecto `productivo. La más aguda especulación y financiarizacion parasitaria, es la divisa de las elites financieras.
A Macri, la suerte de la clase trabajadora, le importa un comino y ni siquiera necesita recurrir a la falaz demagogia de Cristina, que le ha dejado un conjunto de trabajadores empobrecidos, con escasa conciencia de clase, producto de la influencia en su seno, del peronismo.
Con un 40 % de trabajadores en negro, privados de toda protección, confundidos y maniatados, en manos de una burocracia sindical peronista, y divididos convenientemente para los patrones en 5 “centrales” .
Y para ello, los Kirchner y especialmente Cristina, le dejaron todo preparado.
Desde la recomposición, de las obscenas ganancias de los Bancos Privados, luego de la crisis del 2001, hasta la más impresionante fuga de divisas a los paraísos fiscales, en los 12 años de los Kirchner.
Parte importante de la Deuda Fraudulenta, pagada a la Banca Usurera Internacional, utilizando la masa de dólares, que ingresaron durante varios años (el viento de cola), por los precios de las comodities, de las que como la soja, Argentina es gran productora.
Si a esto le suma, la creación por los Kirchner, luego de su propio enriquecimiento, de una nueva pandilla de amigos ricos improvisados, los Báez, los Cirigliano, los López, Szpolsky, Eurnekian, Blaquier, Werthein Insfran, etc., entre otros, que practicaron la corrupción endógena, de los burócratas en el Capitalismo.
Que ahora le vienen bien a Macri, para atacar a los kirchneristas y al mismo tiempo, usar de biombo publicitario para distraer y esconder, la enorme y dilatada corrupción de su padre Franco, la suya propia y su grupo de amigos entre los que Caputo, Calcaterra y Grindeti entre otros se destacan con luces propias. .
Y como frutilla del Postre, una clase media típica, seguidora de la clase dominante. Parcialmente beneficiada por el Kirchnerismo. Codiciosa y egoísta, indiferente e insolidaria con la clase trabajadora, entonces queda claro, que si esta es la “herencia recibida”…Macri se queja de lleno.
Pero ahora viene la pregunta obligada: ¿Puede un gobierno Pirata de estas características sostenerse mucho tiempo en el Poder?
Mi pertinaz optimismo, que tiene en cuenta, el crecimiento de la conciencia de los pueblos, tenue pero constante a lo largo de la Historia, y las circunstancias actuales de la crisis capitalista en curso, me dice que difícilmente pueda sostenerse más allá o incluso durante su periodo “constitucional”.
Por otra parte, tengamos en cuenta, que los Piratas asaltaban sorpresiva, velozmente y se escapaban, llevando los tesoros robados a enterrarlos en islas lejanas.
Todo parecido con el Panamá Papers es pura casualidad.
Entonces ¿Cómo enfrentar a este gobierno enemigo de los trabajadores?
El trabajador debe recordar, que dispone de un arma poderosísima, la huelga.
Es una enorme responsabilidad entonces, de la izquierda clasista, unir a la clase trabajadora, ayudándola ideológicamente a desprenderse del Peronismo, y hacer esta tarea sin temor, a la recepción por parte de los trabajadores, de este enfrentamiento con la verdad histórica.
No es la década del 45 al 55, cuando las circunstancias de una clase obrera en formación, la privaron de entender la función, que el Fascismo capitalista importado por Perón, venía a cumplir
La Izquierda hoy posiblemente solo representada por el FIT, no debe hesitar en enfrentar al Peronismo, en todas las instancias de la clase trabajadora, en las fábricas, en las oficinas, explicándole la falacia de las actitudes de Perón y su falsa ideología, como defensor a ultranza del capitalismo explotador.
Explicar que la clase trabajadora, sigue empantanada en la pobreza, en los 70 años transcurrido del Peronismo.
Pobreza básica de vivienda, salud, educación, alimentación, etc., que las limosnas, desde los regalos de Evita, hasta la asignación por hijos de Cristina, no han logrado ni pueden jamás, resolver la pobreza y demás problemas de los trabajadores, mientras los medios de producción, sigan en manos de los pocos ricos.
Ricos que por lo contrario, acumularon en el mismo periodo más riqueza que nunca.
Escuchamos a cada paso protestar contra el “tarifazo”, y me refiero especialmente a los kirchneristas, que tienen animadores mediáticos, como el entusiasta de Navarro en C5N u otros de Radio del Plata, algunas de las pocas bocas de información, que le heredo, la política de información de Cristina, con su Ley de Medios, castrada desde el día de su aprobación parlamentaria, a los huérfanos políticos que la siguen.
Nos cuentan con razón estos comunicadores, de la característica depredadora de las empresas privadas, que detentan el monopolio de la energía, y se quejan amargamente de sus Ceos, pero curiosamente piden al mismo tiempo, que el aumento sea más racional y más escalonado.
Solo que no escuchamos a nadie de ellos, que aclare, que no existe ninguna otra forma de resolver, la prestación social de la energía, sino pasan al Estado, las compañías proveedoras, que fueron robadas por las multinacionales privadas, en el reinado de Menen, si se desea seriamente resolver el problema.
Ese silencio sobre la única solución posible, es una de las formas en la que el Kirchnerismo, en compañía de los justicialistas de derecha, ayudan al Macrismo a la “gobernabilidad”, eufemismo que se usa en vez de llamarlo por su nombre, “ entrega y conciliación con la derecha ”.
Sin olvidar que tampoco se atreven, a hacer la autocrítica seria a la política de Cristina, con los subsidios que enriquecieron a su grupo de amigos, pero como no se auditaron, fueron robados escandalosamente, y no sirvieron para incrementar la producción de energía, que hiciera frente a la escases prevista para el fututo.
Pero algo debemos decir a su favor.
Estos comunicadores abren su micrófono a la izquierda, lo que nos recuerda, que de ninguna forma en los doce años del kirchnerismo, se daba lugar en ninguno de sus medios, a la voz de la izquierda real, que no conciliaba con el Capital.
Afectuosamente
Hersh Zakheim
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