Un informe conjunto emitido por dos grupos internacionales dedicados al monitoreo de armas ha confirmado que el Pentágono sigue enviando enormes cantidades de armamento a Siria, y que el Departamento de Defensa colabora eliminando el rastro de esas transacciones.
El Proyecto de Informes sobre Crimen Organizado y Corrupción (OCCRP) y la Red de Informes de Investigación de los Balcanes (BIRN) ofrecen pruebas concluyentes de que el Pentágono está involucrado en el envío de hasta 2.200 millones de dólares en armas a sus socios en Siria a través una red de distribuidores privados de dudosa legitimidad.
El Pentágono opera a través de un circuito de comercio masivo de armas cuyo origen está en los Balcanes y el Cáucaso y termina en Siria e Irak.
Los proveedores armamentísticos del Pentágono tienen vínculos con redes criminales conocidas de Europa oriental.
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