La ciudadana chilena, Giselle Rubilar, de 47 años de edad, recibió el pasado sábado un impacto de bala en el ojo izquierdo cuando intentaba sacar una barricada instalada por la oposición en las protestas registradas en el estado de Mérida.
Poco después, Rubilar fue ingresada en cuidados intensivos en un centro hospitalario de la ciudad. Murió al día siguiente de un paro cardiaco a causa de su grave estado.
El deceso fue confirmado por el ministro de Transformación Revolucionaria de la Gran Caracas, Ernesto Villegas, a través de su cuenta en la red social Twitter.
Inmediatamente después, las autoridades venezolanas hicieron nuevamente un llamado al cese de la violencia y anunciaron que el Ministerio Público se encargará de las investigaciones pertinentes a fin de identificar al autor del crimen.
Desde el pasado 12 de febrero, la ultraderecha venezolana, apoyada por el imperio estadounidense, viene promoviendo actos violentos y vandálicos por medio de protestas que, hasta el momento, han dejado al menos 22 muertos, más de 300 heridos y centenares de detenidos.
En este sentido, el analista internacional, Basem Tajeldine, ha afirmado este lunes que tales acciones violentas “de mercenarios de la ultraderecha” están dirigidas a desestabilizar al Gobierno de Nicolás Maduro.
“No son los estudiantes los que intervienen en las denominadas protestas, las cuales tienen el claro propósito de desmontar el estado de derecho y la institucionalidad democrática”, aseguró Tajeldine.
Hispan TV
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