Recientes investigaciones de la Universidad de Nebraska-Lincoln, demuestran que al menos 2 millones de personas en el estado de California, beben agua contaminada con Uranio.
Los acuíferos de los que se extrae esa agua de consumo, están contaminados con niveles de uranio 180 veces superiores a los seguros.
El 78% de esa contaminación proviene del nitrato, un contaminante derivado de los fertilizantes químicos y los desechos animales. Los nitratos oxidan el uranio contenido en la tierra, convirtiéndolo en soluble en el agua subterránea de los acuíferos.
Beber agua contaminada con uranio puede provocar daños renales y presión arterial elevada. Los cultivos alimentarios utilizados en la alimentación también pueden contaminarse por la acumulación de uranio del agua subterránea.
Uno de los acuíferos analizados, suministra agua a ocho estados, desde Dakota del Sur a Texas y otros dos acuíferos contaminados proporcionan agua a una sexta parte de la tierra de cultivo de Estados Unidos.
La investigación fue publicada en la edición de agosto de la revista “Environmental Science and Technology Letters”.
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