Niño palestino limpiando la sangre que dejó su hermano tras ser asesinado por el Estado sionista de Israel; que no te sorprenda tanto verle luego pedir justicia con un fusil.
Niño palestino limpiando la sangre que dejó su hermano tras ser asesinado por el Estado sionista de Israel; que no te sorprenda tanto verle luego pedir justicia con un fusil.
MENUDA HARTADA DE CORDERO SE HABRAN DADO, JA JA JA. LA PROXIMA VEZ QUE VAYA A LIMPIAR, QUE LE PONGAN UN TRAPO AL PALO, PORQUE EL PALO SOLO NO
ResponderEliminarLIMPIA.
Suicidate, Elena.
ResponderEliminarNo mereces vivir.