Un video doméstico grabado por dos hermanos, en el que se les puede ver torturando a un cachorro de Bulldog, ha levantado una oleada de indignación en el Reino Unido y una recogida de firmas para que los hermanos sean encerrados en la cárcel por sus actos.
Andrew y Daniel Frankish, de 22 y 19 años respectivamente, de Redcar, North Yorkshire, se grabaron a sí mismos torturando a un cachorro mientras reían histéricamente.
El video muestra a los dos hermanos golpeando, pateando y pisando al pobre animal y arrojándolo varias veces escaleras abajo y contra el suelo.
El cachorro acabó quedando paralizado de sus patas traseras y tuvo que ser sacrificado tras el incidente.
(Advertencia: el video puede herir su sensibilidad)
Los delitos tuvieron lugar hace más de dos años en octubre de 2013, pero no salieron a la luz hasta que el metraje fue descubierto en una tarjeta de memoria arrojada en el suelo de un supermercado.
A raíz de la sentencia, que mucha gente ha considerado muy blanda, se abrió una petición en Change.org para aumentar la condena a los hermanos, que ya ha reunido más de 62.000 firmas, y atrae más de 100 cada diez minutos.
La petición se acerca rápidamente a su objetivo de 75.000 firmas. Las peticiones que acumulan 100.000 firmantes son generalmente llevadas al Parlamento.
NOTA: No hace falta decir que en otras partes del planeta, prácticas similares son calificadas como “arte”, “tradición” o “cultura”.
Y también podríamos preguntarnos por qué los ciudadanos se indignan tanto por el maltrato a un perrito, pero no se indignan igualmente por los bombardeos contra civiles inocentes perpetrados por sus gobiernos en múltiples países y otros abusos flagrantes sucedidos en todo el mundo.
Estos chicos son unos enfermos peligrosos, pero el caso también es un reflejo de lo enferma que está toda la sociedad occidental.
Hay tantos decerebrados en este mundo que de verdad creen que lo estan haciendo j0d1damente bien.
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